Casting {Zen A.}

Fecha de inscripción : 31/08/2013

Estaba acostumbrándose a la rutina del colegio, no por resignación sino que gracias a el incidente que le trajo aquí tuvo la oportunidad que anhelaba, la cual aprovechaba en cada momento. Al estar entre humanos, se sentía bien, buscaba siempre conversar con ellos y hacerse su amigo pese a la sed natural que estaba en su ser, pero la voluntad de Zen era superior a un instinto como ese. Por las tardes, se quedaba en el patio jugando fútbol, tenis o en lo que se estuviera pasando el rato. Prefería no meterse en algo fijo ya que sí podría participar en más de un grupo y no privarse del júbilo que eso le daba. Generalmente se muestra sociable con sus compañeros, juguetón y por ende risueño. Se notaba que lo pasaba bien.

En esta ocasión, Zen regresaba de uno de los partidos de fútbol bastante sucio, se sacudía apenas las ropas mientras caminaba con cierta agitación, la que iba disminuyendo y el vampiro recuperaba prontamente su aliento normal. Quería volver pronto a los dormitorios, ansiaba ver a Lynn ahora que estaba desocupado ¿Qué estaría haciendo? ¿Estará comiendo algún refrigerio? ¿descansando quizás?, necesitaba verlo y conversar con el, jugar y molestarle. Con mayor ánimo se apresuró a los dormitorios, corriendo velozmente pero sin exagerar ante los simples mortales. Al cabo de ciertos minutos se encontraba en el dormitorio verde, donde podía correr con mayor libertad y pronto se encontraba en el pasillo hacia la habitación del rubio, mas se encontró con algo que le provocó cierta rabia.

- Sabía que Echo aprovecharía... - frunció el ceño severo, mirando desde una distancia moderada mientras se acercaba ya a paso lento hacia el par. Ellos conversaban fuera de la habitación y a juzgar por la escena era el menor quien recién había llegado en visita al contrario. Con picardía sonrió, malicia de sobra y con celos fué hasta su ubicación. Afilò sus orbes, los cuales eran penetrantes e inquisitivos, como si les preguntase el porqué a todo. - Te estaba buscando - ladeó su rostro y focalizó su atención en Lynn, caminando hacia él aún si su hermano estaba conversando con este, le abraza por el costado de manera muy cercana y le sonríe. Cualquiera que conociese al mayor sabría que esa sonrisa no era por alegría, seguramente quien más reconocería el significado tras eso sería Echo. Ahora en un susurro, aprovechando la cercanía tomada - Necesitaba verte, Lynn... - esperando algunos segundos a su reacción, para luego por primera vez dedicarle una mirada a su hermano, más seria que la inicial. - No necesito conversar contigo, puedes volver más tarde... estaré ocupado con Lynn - le guiña un ojo, aún si no fuese a hacer nada con el rubio, eso no tenía porqué darlo por seguro el menor. - o mejor, ven a verle mañana... - sin siquiera mencionar su nombre, era innecesario entre ambos por como estaban las cosas.

Habían dos cosas que podían suceder, la primera y la menos probable es que Echo se quejara e iniciara una disputa, terminando con Lynn entre ambos generando una atmósfera poco favorable para los tres. Zen no permitiría que su juguete hiciera lo que quisiera con Echo, no podía. Lo segundo, es que Lynn despachara a Echo y consintiera a la petición del mayor y así, evitar una disputa o tratar de evitarla. Ya luego iría tras el menor, eso era obvio para Zen. Se apartó solo un poco del lado del rubio para que este decidiera, por fortuna de Zen fué en favor de este,quien sonrió victorioso y sin mayor mediación empujó a Lynn dentro del cuarto dejando al menor fuera, dando un portazo algo brusco.

" Eres mio..."

Sobraba decirlo con palabras por como se aferró Zen al cuerpo de Lynn, estaba de más explicar su pensamiento. Le besó fieramente, tomándole con fuerza de la cintura y pese a que de esta no había escapatoria, en el pensar del mayor estaba el dulce rostro de su pequeño hermano, quien tras todo lo sucedido, mostrarse así ante él generaba un dolor indescriptible, el cual ni siquiera el toque con Lynn podría aminorar. Solo por ello se volcó con mayor brusquedad sobre Lynn, sin contenerse, al estar solos no lo hacía a menudo, por no decir que jamás lo hacía.

[...]

Fecha de inscripción : 25/04/2013

No debería hacerlo por el bien de la salud mental de Echo... Pero...

Casting Aceptado.